Para empezar quiero dejar clara mi razón número uno para probarlo. Nunca me ha gustado ser extremista en cuanto a temas de nutrición se refiere. Tengo clarísimo que cada cuerpo es un universo y que habrá a quienes les caigan bien ciertas cosas o prácticas y a quienes de plano no. He tenido varias coachees que han hecho este tipo de detox y los resultados han sido súper variados. Tengo el grupo que hizo el de 3 días y les cayó perfecto pero al animarse a hacer el de 5 les fue fatal. También tengo las que fácil aguantaron los 5 días y encantadas hubieran seguido más días. Muchísimas opiniones y resultados distintos que no podía quedarme más tiempo con la duda.
Prep and show time...
Una semana antes decidí empezar a prepararme para no entrarle de jalón al proceso de desintoxicación. Eliminé lácteos, granos, azúcar y alcohol de mi dieta y traté de entrarle mucho más a verduras crudas, pollo y pescado. El domingo traté de no cenar nada pesado y dormir muy bien para no quedarme sin energía al día siguiente.
El lunes empecé con un poco de agua tibia con limón y jengibre y de ahí me seguí con los primeros 3 jugos cada dos horas aproximadamente. La verdad es que ese lapso fue el que más me costó trabajo, como que el cuerpo despierta sin saber que onda y espera el desayuno normal por ahí de las 10 am y nada :(
Para la comida el periódo de adaptación había pasado y ya me había acostumbrado al huequito en el estómago (nada grave por cierto) y la tarde la pasé mucho más tranquila.
Ese día en la noche me acordé de un libro que había comprado en mis épocas súper yoguis y me puse a leer sobre la tradición del ayuno, todos sus beneficios y la importancia que tiene a nivel espiritual.
Los beneficios físicos que destacaban son todos los que ya conocemos, mayor energía, pérdida de peso, piel más limpia y suave, etc. Incluso hablaban de gente que se ha curado de enfermedades gravísimas como cáncer siguiendo una dieta de jugos cuando todas las demás terapias parecían no funcionar.
La parte que más me llamó la atención fue la parte espiritual. El autor indica que ayunar es una forma de proclamarle al universo tus intenciones y de dejar claro que eres serio en lo que te propones. Muchos maestros hacen este tipo de ayunos para elevar su conciencia a niveles más altos, tener un mejor control sobre la mente y adquirir claridad. Los alimentos ofrecen estimulación y gratificación a los 5 sentidos, cuando los restringimos se sensibilizan y se elevan a otros niveles de percepción. La intuición aumenta y la conexión cuerpo-mente se hace mucho más fuerte.
Leer esto me dió ese último empujoncito de motivación que necesitaba, me fui a dormir mucho más tranquila y con ganas de empezar el día 2.
El martes fue definitivamente el mejor día. No hubo casi hambre, pude ver mi feed de instagram lleno de comida deliciosa sin surfir como Precious, estuve de mucho mejor humor y pude avanzar muchísimo con un proyecto que traía medio atorado. En la noche me acordé de que justo por estos días tocaba que empezara el lady time del mes así que decidí comerme 1/2 aguacate para que todo fluyera bien y no tuviera días de retraso.
Ayer fue el último día y también la pasé bastante bien, tuve dos pequeños nervous breakdowns durante el día pero esos siento que fueron más por PMS que por otra cosa.
Mis conclusiones
En general creo que me fue bastante bien, traté de llevármela súper leve para no exigirle demasiado al cuerpo y dejarlo descansar. Creo que eso influyó mucho en la experiencia. Sí extrañé muchísimo meterme a la cocina pero la verdad tengo que admitir que verla limpia y ordenada tres días seguidos fue priceless.
Todavía no puedo decir si estoy en contra o a favor. Ahora más que nunca creo que cada persona debe experimentar por sí misma diferentes tipos de dietas, alimentos, combinaciones, detox, etc. y determinar que es lo que le funciona mejor a su cuerpo.
Las conclusiones que sí me quedaron clarísimas y que quiero dejarles son las siguientes:
1. Los detox de jugos no arreglan mágicamente una dieta podrida
Si tus hábitos son malos, si tu cuerpo te ha valido gorro los últimos años, si quieres bajar de peso en 5 días...este tipo de detox no es la solución mágica que estas esperando.
Al contrario, hacer un detox de este tipo cuando no te has preparado bien puede traer consecuencias pésimas para tu salud. Asesorate muy bien y escoge el detox que más va con tu nivel de toxicidad. Si sientes que debes desintoxicarte de años de malas decisiones empieza con un detox mucho más leve que incluya alimentos. Ya que le agarres el hilo a todo lo healthy y a lo que le funciona bien a tu cuerpo entonces ya puedes pensar en un detox más a fondo.
2. La preparación y el seguimiento son clave
Es muy importante darle una o dos semanas de preparación al cuerpo para que los efectos de la desintoxicación no sean tan fuertes. Me han tocado casos de personas con muchísimo cansancio, dolores de cabeza, diarrea, etc. y todo es por que el cuerpo no sabe ni que le esta pasando.
Si consumes café, productos procesados, azúcar refinada y harinas regularmente, te recomiendo que los cortes por completo una semana antes para no pasarla mal y aprovechar el detox al máximo.
Al terminar también es súper importante darle continuidad, reincorporar los alimentos que pueden ser tóxicos poco a poco para así darte de cuenta de cuáles realmente te hacen daño. Yo sé que después de tres días sin alimentos mueres por comer lo que sea y una dona parece el premio adecuado para tu gran fuerza de voluntad...no te la comas! por más que se te antojen cosas chatarrosas no las comas en esos primeros días de reintegración si no quieres darle en la torre a tu pobre intestino.
3. Toma en cuenta la parte mental y espiritual
Creo que a mí esto fue lo que más me ayudo. No sé si yo solita me programé después de leer mi libro pero de verdad sí pude sentir mucho más claridad y conexión con mi cuerpo. Trata de encontrarle un sentido más allá de lo físico para que así todo fluya mucho más fácil y sea realmente un momento de reecontrarte con tu cuerpo.
4. Escucha a tu cuerpo
Pasé lo que pasé escucha a tu cuerpo. Si en algún momento te sientes mal o sientes que tienes que comer algo, házlo. Yo comí medio aguacate y medio plátano en los tres días y me cayeron de maravilla. Escoge opciones naturales y porciones pequeñas para evitar que te caigan mal.
Sobre todo escúchalo al terminar el detox. Si sientes que te ayudó a avanzar en tu camino de bienestar y salud, increíble! Ahora tienes una herramienta más a la cual acudir para sanar internamente. Si por el contrario, sentiste que sufriste horrible y que no te ayudo en lo absoluto, tal vez este no es el detox ideal para ti. Agradece la experiencia y sigue descrubriendo y probando cosas nuevas. Eso es lo divertido, ser tu propio conejillo de indias hasta dar en el clavo con lo que realmente te funcione y te haga sentir increíble y feliz.
Yo me quedo súper contenta, con una intuición renovada sobre lo que realmente le hace bien a mi organismo, con más energía y con la piel libre de los granitos molestos que no me habían dejado en paz desde hace unas semanas.
Les agradezco muchísimo a las fundadoras de Juice Heaven por darme la oportunidad de probar el detox...ya tienen una fan más! :)